Dientes y envejecimiento
Nuestros dientes van envejeciendo con el paso del tiempo por su uso diario. Durante muchos años se consideró que perderlos era un proceso natural propio de la edad. Actualmente esta idea pertenece al pasado.
La gran mayoría de los adultos mayores de hoy perdieron sus piezas dentales causa de la falta de correcto mantenimiento y, porque en la odontología pasada se manejaron criterios que ya no son aceptados y por eso extraían los dientes sin tratar de conservarlos.
¿Arrancar dientes? Una solución del pasado
Tradicionalmente se acudía al dentista cuando se sufría molestias o incluso dolor. En pocos años hemos pasado de la época de nuestros abuelos, donde la extracción dental era la opción de tratamiento más habitual, más tarde la época de nuestros padres donde se empastaban los dientes para su conservación, a la actualidad donde hemos dejado una actividad dirigida exclusivamente a la enfermedad para reorientar hacia el mantenimiento de la salud trabajando en prevención para así evitar al máximo cualquier tratamiento restaurador.
La realidad de muchos adultos mayores es la carencia de parte o todos sus dientes. Gracias a las soluciones protésicas y las técnicas con implantes puede mejorar sustancialmente su confort y capacidad masticatoria. Estas bocas rehabilitadas necesitan un mantenimiento preventivo más intensivo.
Numerosos estudios sobre la tendencia de conservación de los dientes, determinan que la expectativa hoy, llevando una buena higiene bucodental y una correcta atención preventiva, es conservar la gran mayoría o su totalidad durante toda nuestra vida.
Nuestra boca en la vejez…
Algunos de los problemas más comunes que se presentan a la boca durante la vejez son: gingivitis (inflamación de las encías), periodontitis (piorrea), caries, movilidad dental, fragilidad dental (piezas que se fracturan), ausencia de piezas dentales, prótesis dentales inadecuadas o mal adaptadas que se mueven y producen rascaduras, boca seca (xerostomia)…
Todas estas patologías y problemas pueden solucionarse, con más o menos dificultado, si se va a la visita con el dentista. Después de un examen clínico y radiológico de su boca, le podremos dar seguramente más de una solución a su caso, mientras el profesional le explica en detalle cómo pueden aplicarse a la boca.
Más allá de un problema estético
Ir perdiendo dientes es un problema que afecta la calidad de vida a medida que vamos envejeciendo, pero no sólo se trata de un problema que sufren los mayores, también puede darse en personas en la edad adulta. La pérdida parcial o total de piezas dentales, conocida como edentulismo, es un trastorno que va más allá de la cuestión estética, puesto que puede alterar la forma de cerrar la boca o, incluso, afectar a la hora de masticar.
Todos estos cambios pueden comportar alteraciones en el habla, a la hora de masticar la comida y en la articulación de la mandíbula, además de problemas estéticos, como envejecimiento precoz de la cara o mayor prominencia de la mandíbula inferior sobre el maxilar superior (pseudoprognatismo) , entre otros muchos, incidiendo negativamente en la autoestima del afectado.
Hoy en día es imposible creer que haya personas mayores que sufran molestias y dolores en sus bocas o que estén disconformes con su aspecto. Ya no hay que seguir sufriendo ni pensar: «… total por la edad que tengo me dejo la boca abandonada …», cada vez sube la edad de supervivencia, es muy común que atendamos cada semana pacientes que tienen más de 80 años.
Tenemos que mantener la calidad de vida hasta el último de nuestros días, y tener la boca en condiciones forma parte de esto. No renuncie a comer correctamente ni a tener una bonita sonrisa, consúltenos su caso y le daremos una solución!